Benicàssim, el blues frente al mar
Los amantes del género musical más triste tienen una cita ineludible en el Benicàssim Blues Festival que vuelve por décimotercera ocasión a la población castellonense del 31 de mayo al 2 de junio de 2024 para inundar sus calles de las blue notes más solicitadas del panorama español y europeo. El cartel de este año está todavía por definir.
El festival, organizado por el Ayuntamiento de Benicàssim, tendrá lugar durante tres días en los que, además de actuaciones, se realizarán conciertos didácticos, master class, citas de vermut & blues y una jam session final junto a la playa. Además habrá demostraciones de baile a cargo de la escuela Castellón Baila, exposiciones de fotografía y acuarelas y presentaciones de discos, entre otras actividades.
El Benicàssim Blues Festival coincide con un evento gastronómico de nivel, las Jornadas Gastronómicas de la Sepia y el Sepionet, que se celebran del 2 al 8 de junio. Establecimientos hosteleros de Benicàssim servirán a sus clientes menús y tapas basados en estos ingredientes típicos del Mediterráneo.
El intenso calendario musical y cultural ha hecho que Benicàssim sea merecedora de la marca Ciudad de Festivales porque la localidad acoge 14 grandes eventos. Además del mencionado Benicàssim Blues Festival, la población es sede en julio del conocidísimo FIB, del Festival de Habaneras o del Rototom Sunsplash.
Otros festivales destacables son el Certamen Internacional de Guitarra Francisco Tárrega, el Festival de Teatro con Buen Humor, la Biblioteca del Mar, Benicàssim Belle Époque o el Festival Nacional de Bailes de Salón.
Benicàssim, para todos
Benicàssim quiere llegar a todos los públicos para que todos los públicos viajen esta localidad de la Comunidad Valenciana. El destino tiene recursos y atractivos turísticos para todas las tipologías de visitantes, con una oferta turística variada y de calidad. A tal efecto su lema es Benicàssim, la mejor elección todo el año.
En lo que se refiere a turismo familiar, la localidad apuesta por el ecoturismo. El entorno natural de Benicàssim destaca por los contrastes paisajísticos de su privilegiada ubicación entre el Mediterráneo y el Parque Natural del Desierto de las Palmas.
Aquí se pueden realizar rutas ecuestres, de senderismo y cicloturismo, o visitar el Museo de Arte Sacro de los Padres Carmelitas o el Centro de Interpretación de la Bartola. Tampoco hay que olvidar la oferta de ocio en el minigolf, la bolera, los karts o el Parque Acuático Aquarama, además de la intensa programación del Cine-Teatro.
Benicàssim es un buen lugar para la práctica del turismo activo como lo demuestran las rutas anteriormente mencionadas y la Vía Verde del Mar, un trayecto de unos 6 kilómetros adaptado para su circulación a pie o en bicicleta que era antiguamente el recorrido ferroviario entre el municipio y Oropesa del Mar.
A esta oferta se suma la Escuela de Vela, que ofrece actividades enfocadas a la vela ligera, windsurf y piragüismo.
A todo ello se suman las cinco playas, todas ellas adaptadas para personas con discapacidad, que se reparten a lo largo de sus siete kilómetros de litoral: Voramar, Almadraba, Torre San Vicente, Els Terrers y Heliópolis. Todos ellas tienen la Bandera Azul que otorga la Fundación Europea de Educación Ambiental además de otras distinciones.
Benicàssim es un reputado destino turístico desde el año 1887. Por este motivo guarda uno de los patrimonios más encantadores de la costa mediterránea: la Ruta de las Villas. Este itinerario recorre 21 palacetes, muchos de ellos construidos por las familias pudientes que en plena Belle Époque encontraron en Benicàssim su paraíso vacacional. Hay dos rutas según la corriente artística predominante en el momento de construcción y el carácter de los residentes.
La del Infierno, por un lado, debe su nombre a las fiestas que tenían lugar en las villas de la zona, mientras que la ruta de la Corte Celestial se distinguía por la tranquilidad de sus calles. En este escenario tendrá lugar del 6 al 8 de septiembre de 2024 Benicàssim Belle Époque, una recreación histórica repleta de actividades donde se rinde homenaje a aquellos años dorados.
Cualquier excusa es buena para visitar Benicàssim en cualquier época del año. Actividades, festivales y una intensa vida agenda cultural son un reclamo para viajar a esta localidad que ofrece una larga lista de posibilidades como actividades deportivas al aire libre, gastronomía y, ante todo, descanso y diversión. Todas ellas se pueden consultar en www.turismobenicassim.com.