La Pineda Platja en otoño: naturaleza y patrimonio todo en uno
Vila-seca, la Pineda Platja es un destino que se puede visitar durante todo el año pero, cuando llega el otoño, cobran un protagonismo especial los colores amarillos, ocres y marrones que tiñen los espacios de esta localidad de la Costa Daurada.
Es la estación perfecta para disfrutar de la naturaleza de Vila-seca, la Pineda Platja ya que el calor del verano ya no está presente y las temperaturas son muy agradables tanto para dar un paseo como para practicar deporte al aire libre.
Naturaleza en otoño en Vila-seca, la Pineda Platja
Uno de los lugares de Vila-seca, la Pineda Platja que adquiere un tono otoñal que invita a recorrerlo es el parque de la Torre d’en Dolça, denominado así por la torre de defensa que se levanta en medio del parque y que data del siglo XVI.
Este amplio espacio verde, situado al lado del Raval de la Mar -carretera que une Vila-seca con la Pineda-, se ha diseñado con criterios de sostenibilidad y es el elegido por muchas familias con niños para recoger las hojas de los árboles que empiezan a caer con la llegada del otoño y realizar con ellas murales para el colegio.
En el parque de la Torre d’en Dolça se han habilitado varias lagunas artificiales y zonas húmedas con micrófitos, perfectas para observar gran cantidad de pájaros migratorios. Es un espacio muy adecuado tanto para hacer rutas a pie o en bicicleta.
Otra área verde de Vila-seca, la Pineda Platja que no os podéis perder en otoño es la Séquia Major, una zona húmeda litoral protegida por el Plan de Espacios de Interés Natural (PEIN) de la Generalitat de Catalunya desde el año 1992.
La Séquia Major, que se puede visitar entre los meses de agosto y febrero, se recorre a través de unos itinerarios gratuitos aptos para todas las edades. Durante la excursión se explica la historia del lugar y sus valores naturales, se interpretan las rastros de actividad animal a través de las huellas, las plumas, los nidos y los restos de comida, y se observan pájaros y especies protegidas con prismáticos.
En la Sèquia Major habitan comunidades vegetales y animales singulares, como el fartet o la tortuga de estanque, que en la actualidad no son muy habituales en muchos otros lugares del territorio catalán. Este año, a causa de la Covid 19, es obligatorio llevar mascarillla, mantener la distancia social y llevar los propios prismáticos para la observación.
Las visitas hay que reservarlas con antelación en el teléfono 977 373 037 y se llevan a cabo de octubre a febrero los domingos de 11.00 a 13.00 h.
Vila-seca, la Pineda Platja es un destino que atrae a los aficionados al turismo activo, tanto por libre como en familia. Uno de los espacios preferidos de los visitantes para dar un paseo o para hacer una ruta en bici es el Raval de la Mar, un gran vial de casi 3 kilómetros que permite el tráfico rodado.
Recorre el patrimonio de Vila-seca, la Pineda Platja en otoño
Los meses de otoño en el litoral mediterráneo se caracterizan por su suavidad. El mar atempera el clima y, por este motivo, visitar el casco histórico de Vila-seca, la Pineda Platja es un verdadero planazo ya que podremos olvidarnos por un momento de la canícula estival y disfrutar del núcleo antiguo de esta bella localidad de la Costa Daurada.
Conocer el patrimonio de Vila-seca, la Pineda Platja es muy sencillo gracias a la instalación de 10 tótems identificativos, ubicados en los monumentos más relevantes que ofrecen datos históricos y de interés tanto a turistas como a ciudadanos. Esta información está disponible en cinco idiomas y se puede acceder a ella a través de los códigos QR disponibles en cada uno de los puntos estratégicos.
El itinerario se puede empezar en el Raval de la Mar, situado muy cerca de la entrada del centro histórico. Allí se alza la Creu de la Beguda del siglo XII, último vestigio de las cruces del término y de otros indicadores anteriores que señalizaban los caminos.
Esta cruz tenía antiguamente la función de limitar los territorios de Salou, Vila-seca del Comú y Vila-seca de Solcina. Ya adentrados en el casco antiguo, los visitantes descubren varios monumentos como su castillo neo medieval de esbelta silueta; la iglesia de Sant Esteve, un edificio del siglo XVII de estilo neoclásico; el Celler Noucentista, obra de grandes dimensiones con tres naves de planta rectangular que en 2019 llegó a su centenario; el Portal de Sant Antoni, del siglo XIV; la Torre de la Tuies del Cafè del XV; y las Torres de l’Abadia, del Delme y del Homenatge (XII).
Halloween llega a PortAventura
Una de las razones de visitar Vila-seca, la Pineda Platja en otoño es pasar una jornada en el cercano PortAventura sobre todo con la llegada de Halloween, ya que este parque temático se transforma para que los visitantes puedan sentir su espíritu en cada rincón.
Calabazas, fantasmas, murciélagos o telarañas inundan PortAventura Wolrd, que propone una una experiencia completa de atracciones, restauración y alojamiento pensada para todas las edades.