Tres lugares que ver en familia en la comarca del Berguedà
Uno de los destinos que hemos descubierto recientemente ha sido el norte de la comarca barcelonesa del Berguedà, en pleno Prepirineo, donde visitamos la Presa de La Baells, el Museo de las Minas de Cercs y el Centro de Interpretación de Dinosaurios de Fumanya. Dichas actividades, gestionadas por el Museu de les Minas de Cercs, forman parte de las rutas de turismo industrial que recorren Catalunya y son muy recomendables hacerlas con niños porque conjugan tres elementos que les encantan: el agua, la minería y, cómo no, los dinosaurios.
ÍNDICE / CONTENIDO
Vídeo comarca El Berguedà
Visita a la Presa de La Baells con niños
La Presa de la Baells es una de las infraestructuras hidráulicas más importantes de Catalunya. Con una altura de 112 metros, este embalse se inauguró en el año 1976 y tiene como finalidad actualmente regular las aguas de los ríos que lo alimentan, el Llobregat principalmente y la riera de Vilada, para proveer a la ciudad de Barcelona y su área metropolitana de recursos hídricos. En un inicio esta presa abastecía a las diferentes colonias textiles que había diseminadas a lo largo del curso del Llobregat y que fueron cerrando una a una por la crisis del sector. Por este motivo se decía de esta arteria fluvial catalana que era el río más trabajador del mundo.
La Baells anega una superficie de 365 hectáreas de los términos municipales de Cercs, Vilada y La Quar y su capacidad es de 115 hectómetros cúbicos o, lo que es lo mismo, 115 millones de metros cúbicos. La construcción del pantano se tradujo en un fuerte impacto en el entorno ya que provocó la desaparición del pueblo de Sant Salvador de la Vedella (solo queda visible una iglesia que estaba situada en una pequeña loma), el cierre de líneas ferroviarias, y la creación de un núcleo nuevo de población: Sant Jordi de Cercs. Asimismo y como curiosidad las aguas de la Baells permiten pescar especies como carpas, lucios, siluros o truchas.
Visitar la Presa de La Baells es muy interesante para todos los públicos pero sobre todo es muy adecuada para los más pequeños (el recorrido lo pueden hacer los niños a partir de 7 años) porque aprenden de una manera muy visual la importancia que tienen los pantanos para almacenar agua y producir electricidad. Es imprescindible hacer una reserva previa y los precios son bastante económicos. El itinerario se realiza en pequeños grupos y todos los integrantes han de llevar casco, chaleco reflectante y una caja de herramientas. La visita tiene una gran función didáctica ya que se entrega un dossier con preguntas que han de ser respondidas para averiguar unos códigos de activación de la presa por lo que los reyes de la casa tienen que estar atentos a toda la información para poder cumplir el objetivo.
Uno de los lugares más interesantes de la presa de La Baells es la corona, la única galería que está descubierta y que conecta la infraestructura desde el extremo derecho hasta el izquierdo. Aquí se han instalado una serie de paneles informativos que explican desde la historia del embalse hasta la importancia que tiene el agua en nuestras vidas. En el recorrido también se explora una galería de inspección en la que hay varios aparatos con los cuales los técnicos controlan el funcionamiento de la presa.
Museo de las Minas de Cercs
La siguiente parada en esta ruta por el norte del Berguedà la hicimos en el Museo de las Minas de Cercs, situado en la antigua colonia de Sant Corneli, uno de los núcleos mineros más importantes de Catalunya. Se creó en el año 1999 formando parte del Museu de la Ciència i de la Tècnica de Catalunya y está adherido a la red de museos locales de la Diputació de Barcelona. El Museo de las Minas de Cercs cuenta con dos espacios bien diferenciados. En el primero se conoce el museo propiamente dicho.
Éste cuenta con una exposición permanente en la que, por un lado, se explica todo acerca del carbón, la explotación y la importancia de las infraestructuras mineras; por otra parte también se muestra cómo era la vida cotidiana de los mineros. Además se proyectan varios audiovisuales, dos sobre las reivindicaciones más emblemáticas de este colectivo y uno sobre la cuenca minera del Alt Berguedà.
La segunda parte de la visita es la que más gusta a los niños ya que se han de subir a un tren para adentrarse en una mina auténtica, la de Sant Romà, cuya longitud total es de seis kilómetros (aunque solo se penetra unos 500 metros). Aquí se hace un repaso a la historia de 150 años de minería y cómo evolucionaron tanto las condiciones de trabajo y la maquinaria usada. En este sentido, en un primer momento las excavaciones se hacían con un pico y se llevaba en vagonetas que podían llegar a pesar casi dos toneladas.
Las condiciones de trabajo eran pésimas por la mala iluminación y por la falta de oxígeno que mermaron la esperanza de vida de los mineros de aquella época. En aquel entonces los mejores amigos de estos trabajadores eran los pájaros pequeños (especialmente los canarios) porque su menor capacidad pulmonar alertaba de la ausencia de oxígeno y fallecían para salvar a los mineros de una muerte segura. Además, los obreros corrían siempre el peligro de un escape de grisú, un gas que cuando contacta con el oxígeno provoca graves explosiones.
En los años 30 los picos fueron sustituidos por los martillos neumáticos de aire comprimido que facilitaron el uso de cargas explosivas para extraer el carbón y las minas se reforzaron con pilares belgas. En los 60 llegaron los pilares rusos, la cinta transportadora y otros elementos que mecanizaron el trabajo en la mina. La seguridad de los trabajadores fue mejorando y ya en los últimos años llevaban casco, mono, guantes y botas, entre otros elementos. Pero esto duró poco tiempo ya que la mina de Sant Corneli cerró en el año 1991.
Centro de Interpretación de Dinosaurios de Fumanya
En un paraje excepcional en el pequeño pueblo de Fígols, en el Alt Berguedà, se encuentra el conjunto paleontológico de Fumanya, la tercera parada que hicimos en esta ruta por esta comarca barcelonesa. Se trata del yacimiento europeo más extenso con huellas de saurópodos del Cretácico superior y uno de los más importantes a nivel mundial. El Centro de Interpretación de Dinosaurios de Fumanya, situado a unos 7 kilómetros del Museo de las Minas de Cercs, abrió sus puertas en 2017 y es, verdaderamente, kriptonita para los niños porque allí pueden saber todo acerca de sus animales, extinguidos, favoritos.
Este espacio se ubica en los terrenos donde estuvo la explotación minera de Fumanya, operativa entre 1975 y 1986, y que dejó al descubierto este gran yacimiento paleontológico con más de 3.500 huellas de dinosaurios. Las icnitas más comunes son las del Titanosaurus, un gigante herbívoro que podía llegar a medir unos 15 metros de alto y pesar unas 20 toneladas.
El Centro de Interpretación de Dinosaurios de Fumanya está dividido en varios niveles en los que hay paneles expositivos, audiovisuales, juegos interactivos, exposiciones temporales y un espacio para talleres. Aunque el lugar que más llama la atención es su mirador desde el que se tiene una estupenda perspectiva del yacimiento.
Estas tres actividades que hemos mencionados son perfectas para pasar un día en familia por la comarca del Berguedà ya que los más pequeños se lo pasan en grande y aprenden muchas cosas, en plena naturaleza, sin tener que recurrir a tabletas o móviles. Y lo mejor de todo es que este destino se encuentra a poco más de una hora de Barcelona en coche así que puede ser un gran plan para un sábado o un domingo.
Más información de todas las actividades en www.mmcercs.cat