Turrialba, mucho más que queso
Turrialba es una ciudad de Costa Rica ubicada en el Valle Central que cuenta con una infinidad de intereses turísticos que ver donde el visitante tiene la ocasión de disfrutar de la pura vida costarricense, de su cultura y de las actividades de deporte y aventura, sin olvidarse de su deliciosa gastronomía.
Turrialba es una ciudad muy tranquila, de bellos paisajes donde destaca, a tan solo 15 kilómetros de la localidad, el imponente el Parque Nacional Volcán Turrialba, cuya última erupción fue en el año 1866. Sorprende que haya un acceso directo a su cráter por lo que la excursión merece mucho la pena. Además, desde la cima del volcán y si el día está despejado se divisan los volcanes Irazú, Poás y Barva a la distancia.
Turrialba se fundó gracias al desarrollo económico que se produjo en la zona por la construcción del ferrocarril al Caribe. Asimismo y entre muchas otras cosas, Turrialba es Interés Arqueológico Nacional por su cercanía a vestigios de asentamientos indígenas de gran relevancia para el país como el Monumento Nacional Guayabo, declarado Patrimonio Mundial de la Ingeniería en el año 2009.
En los últimos años se ha convertido en la base de muchos operadores turísticos que quieren dar a conocer el rafting en aguas blancas en el Río Pacuare, que ha sido considerado en varias ocasiones como una de las arterias fluviales más hermosas del mundo para practicar este deporte de aventura.
Pero también en Turrialba es posible realizar una ruta gastronómica por todos sus rincones ya que se trata de un destino turístico donde se centraliza la elaboración de uno de los quesos artesanales más famosos de Costa Rica: el queso de Turrialba. Con motivo de esto desde el año 2002 se lleva a cabo en Santa Cruz, un pueblo rural enclavado en las faldas del volcán Turrialba, la Expo Feria del Queso, dedicada exclusivamente a los quesos artesanales que se elaboran en esta cuna de la producción láctea.
Para visitar Turrialba y disfrutar de todos y cada uno de los atractivos turísticos es importante hospedarse en hoteles que garanticen el descanso. En este sentido, el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) puso en marcha el Certificado de Sostenibilidad Turística (CST), que consiste en clasificar según categorías y diferenciar a los hoteles de Costa Rica según su grado de sostenibilidad en el que operen atendiendo al manejo de los recursos naturales, culturales y sociales.
A tal efecto y como parte de la oferta de hospedaje se pueden encontrar hoteles que cuentan con 4 hojas CST, es decir, alojamientos donde el visitante puede descansar y disfrutar de los máximos estándares de calidad después de un productivo día de turismo. El primero de ellos, el Hotel Casa Turire, es una finca que recuerda a las tradicionales casas de plantaciones coloniales que destaca por su vegetación y sus bellos paisajes.
Por su parte, Guayabo Lodge es un eco lodge familiar situado en las laderas del volcán Turrialba donde desconectar del ajetreo diario y conectar, a su vez, con la naturaleza.
Por último, el Hotel Villa Florencia destaca además de por su estilo sofisticado, por ser uno de los lugares más pintorescos del Valle de Turrialba y por estar rodeado de plantaciones de caña de azúcar.
Web oficial en español: www.visitcostarica.com/es