Cinco razones para viajar a Valonia
Valonia, región del sur Bélgica, es uno de los destinos más atractivos del corazón de Europa para disfrutar de la naturaleza ya que tiene mucho que ver y muchas actividades que hacer. Cinco son los motivos más destacados para viajar a Valonia que forman parte de su esencia y que la convierten en un enclave sugerente para disfrutar de una forma diferente de unas vacaciones o una escapada corta.
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Valonia, tierra de agua
Pese a que no tiene acceso al mar, en Valonia el agua es uno de los grandes atractivos turísticos. Cuenta con manantiales de fuentes termales por lo que una de las visitas imprescindibles de esta región belga son los establecimientos de hidroterapia o spa, que todavía gozan de mucha popularidad desde sus orígenes en el siglo XVI. Además, los lagos Eau d’Heure, un destino que permite largas estancias de incluso más de una semana, ofrecen numerosas actividades deportivas o de relax en un entorno verde exuberante.
Turismo histórico en Valonia
Valonia alberga escenarios de batallas del pasado. Por su ubicación, este territorio ha sido partícipe de algunos de los conflictos bélicos más importantes del siglo XX siendo la I Guerra Mundial especialmente cruel con las tierras valonas.
El ejercicio de memoria histórica que ha hecho la región le ha permitido abordar este factor desde el ángulo turístico. En este sentido, algunos de los enclaves más destacados son el Memorial Waterloo 1815, un museo que con sus atracciones hacer revivir la batalla final que Napoleón perdió contra Wellington.
Asimismo, a menos de 5 kilómetros de Waterloo, se ubica la Colina del León, un monumento emblemático que simboliza la victoria del Duque de Wellington.
También destaca la zona de Las Ardenas donde hace 75 años se libró la Batalla de del mismo nombre, una de las más sangrientas de la Segunda Guerra Mundial. Allí se encuentra el único museo de dicha contienda que presenta una sección británica y donde se muestran más de 120 maniquíes de soldados americanos, ingleses, alemanes y escoceses con su equipamiento, armamento y uniformes.
Deporte en Valonia: del senderismo al mundo del motor
Valonia es una región donde hay la posibilidad de realizar un gran número de actividades al aire libre en cualquier época del año. El senderismo es una práctica muy habitual, gracias a la geografía ligeramente montañosa que ofrece la región.Gracias a esta orografía, el ciclismo también es un deporte muy popular debido, en parte, a la red Autónoma de Vías Lentas (RAVel) valona, un conjunto de más de 45 itinerarios señalizados. Estas rutas son muy atractivas para los turistas que visitan la región en familia, ya que son trayectos de baja dificultad que también se pueden recorrer a pie, en caballo o en bici.
Por su parte, los amantes del motor tienen una cita cada año en Valonia con el Gran Premio de Fórmula 1 Spa Francorchamps que, según algunos pilotos, es uno de los más espectaculares del mundo.
La naturaleza en Valonia
Valonia esconde agradables sorpresas para los amantes de la naturaleza. Destacan las cuevas de Han, de las cuales 15 son accesibles al público, y que se alzan con tres estrellas en la Guía Verde Michelin. Hay diversos atractivos turísticos para visitar en los alrededores de las Cuevas de Han, como los recorridos espeleológicos por los sótanos, diseñados para los turistas a los que les gustan las emociones fuertes.
La Navidad en Valonia: un must del invierno
Tanto en las grandes ciudades como en pequeños pueblos, las calles de Valonia durante la Navidad están invadidas por luces mágicas, decoraciones festivas y mercados. A tal efecto Lieja, junto a la población madrileña de Torrejón de Ardoz, fue elegida Capital Europea de la Navidad en 2018. Esta ciudad alberga el mercado más grande de Bélgica: el Pueblo de Navidad de Lieja, que tiene un total de 200 casetas y que, por tener, tiene hasta un alcalde.
Asimismo, el mercado liejense cuenta con otras actividades emblemáticas como la exposición de bolas de Navidad pintadas a mano por el propio pueblo. Además de decoraciones y ornamentos, en los mercados valones es fácil encontrar bebidas como el vino caliente o el peket (un brandy con aroma de bayas), unos clásicos de la Navidad de la región.