La restauración de la Casa Batlló se abre al público
La Casa Batlló de Barcelona ofrece hasta el próximo 5 de mayo a través de Casas Singulares, entidad experta en casas emblemáticas, una visita exclusiva a la restauración histórica de este edificio del genial arquitecto Antoni Gaudí. Este recorrido, de la mano de un guía experto, te sumerge en el proceso de remodelación, desde la recuperación del revestimiento original de las paredes y techos de la planta noble, hasta los trabajos de conservación y mantenimiento de la fachada que los visitantes pueden descubrir a través de la pasarela skywalk, en una experiencia única.
La ruta por la Casa Batlló descubre cómo los arquitectos y restauradores afrontan el reto de recuperar el estado original de la casa, un edificio que es Patrimonio Mundial de la Unesco.
Casa Batlló es el resultado de una remodelación de Antoni Gaudí entre los años 1904 y 1906. Los propietarios de la casa fueron Josep Batlló i Casanovas y su esposa Amalia Godó y Belaunzaran, quienes encargaron al arquitecto la reforma de un edificio preexistente que habían adquirido unos años antes para instalar su residencia familiar.
Casa Batlló estuvo en manos de la familia Batlló hasta los años 50, cuando Seguros Iberia compró el edificio para instalar sus primeras oficinas en Barcelona e inició una importante remodelación. Esta empresa ocupó el inmueble hasta 1993, año en el que la familia Bernat, actuales propietarios, se hicieron cargo del edificio. En el año 2002, con motivo del Año Gaudí, la casa abrió por primera vez sus puertas a la visita pública, aunque poco antes ya se podían alquilar los espacios para eventos.
Desde el año 2002 hasta nuestros días, Casa Batlló se ha convertido en un icono de la ciudad de Barcelona y una referencia en el ámbito internacional de la arquitectura de Antoni Gaudí, convirtiéndose en uno de los monumentos más visitados de la ciudad e inscribiéndose en la lista de Patrimonio de Mundial de la UNESCO en 2005. En este sentido, este proyecto de restauración se pone en marcha en el año 2014 después de la redacción de un Plan Director iniciado en 2012 y dirigido por un equipo de profesionales formados por los arquitectos Xavier Villanueva, Ignacio Villanueva y Mireia Bosch, y el arquitecto técnico y doctor en tecnología, Joan Olona, además de un importante equipo de restauradores.
Recuperar los estucos originales
Uno de los objetivos de la restauración es mostrar la piel original del edificio y preservarla para las próximas generaciones cumpliendo de forma ejemplar las normas aplicables. El proyecto tiene como objetivo mejorar la circulación de las visitas al edificio y dar respuesta a la accesibilidad y a las necesidades que requiere un patrimonio de estas características en el siglo XXI. Por este motivo se comienzan los trabajos de prospección donde se descubre el revestimiento original de paredes y techos de la planta noble, que habían sido cubiertos con capas y capas de pintura.
De hecho se tenía conocimiento de la existencia del estuco original, pero no se sabía en qué cantidad ni qué calidad. Con las prospecciones se evidencia que aproximadamente el 40% de la planta noble conserva el estuco auténtico, por lo que la dirección de Casa Batlló decidió iniciar un proyecto de restauración con el fin de recuperarlo.
La técnica utilizada por Gaudí consistió en un estuco de cal de diferentes tonalidades. Los motivos por los que se consideran extraordinarios estos estucados son por la calidad del acabado, la distribución multitonal y sus cambios de colores. Para recuperar este elemento se debe hacer un decapado que se realiza con bisturí y luego se hace un decapado químico.
Terminada esta fase se limpia la superficie para eliminar los residuos y se comienza la restauración. Todas las paredes y los techos, que no tienen ningún ángulo recto, se han recubierto con estuco, intentando simular una caligrafía ininterrumpida en cada sala. Se cree que el arquitecto quería reproducir el trencadís de la fachada en el interior de las estancias de la familia Batlló. En la fachada utilizó la cerámica para hacer el trencadís tan característico de la Casa Batlló, y en el interior lo hizo a partir de estucos para poder seguir las curvas de las paredes y los techos.
También se está trabajando en la conservación de la fachada de Casa Batlló. Estos trabajos, a diferencia del interior, son de limpieza y restauración de los balcones, protegiendo los cinco elementos propios de la fachada: cerámica, piedra, madera, vidrio y hierro. Gracias a la instalación del andamio durante los meses que perduren estos trabajos se ha podido diseñar una pasarela denominada skywalk, que permitirá a los visitantes caminar por la fachada a 30 metros de altura y disfrutar de la azotea del edificio desde su parte frontal, una experiencia única en la historia.
Las visitas a la restauración de Casa Batlló comentadas por Casas Singulares se realizarán hasta el 5 de mayo. Están dirigidas a grupos concertados y personas individuales, y se hacen en catalán y castellano los martes a las 12 horas, los jueves a las 16 horas y los viernes y los sábados a las 19.30 horas.
Para más información se pueden consultar las condiciones y duración de las visitas de restauración de Casa Batlló en la página web de Casas Singulares www.casessingulars.com