En otoño y en familia por Euskadi
Llegó el otoño y pronto se asomará el invierno, los días fríos, la nieve y junto a ello, también llegan las ganas de acurrucarse al lado de alguna chimenea con los niños, disfrutar de la variada gastronomía vasca, y por qué no, conocer algún lugar nuevo. Euskadi nos espera, no hace falta que mires al cielo para ver si el buen tiempo te acompañará en tus excursiones. No es necesario, vivir y disfrutar de Euskadi es posible también en invierno. Atrás quedan los días de playa y mar, y ahora toca ponerse las botas, abrigarse y disfrutar.
ÍNDICE / CONTENIDO
Una ruta por la Llanada alavesa
Podemos comenzar nuestro itinerario por la Llanada alavesa. Alrededor del parque natural del Aizkorri -Aratz, encontramos una comarca con muchísimas posibilidades y atractivos para las familias con peques que quieran visitarla. Como en cualquier rincón de Euskadi, la naturaleza es el atrezzo perfecto para poder idear planes en familia.
Empezamos el día acercándonos al Parketxe donde visitaremos la casa del parque para conocer y disfrutar al máximo del patrimonio natural y cultural que nos rodea. Este es un espacio accesible para poder llegar con silla de bebés, equipado con cambiador. Además, junto al río a disposición del visitante, existe un área recreativa con un frontón y pequeña cubierta y una mesa y bancos con una barbacoa. Es un lugar Ideal para poder realizar un pequeño picnic.
Por la tarde podemos realizar una actividad adecuada a familias con niños en el escape room Lautada puzle room la primera sala de este tipo en Euskadi situada en un entorno rural. Divertirse y “salvar el planeta” al mismo tiempo es sin duda una aventura apta para todos los públicos.
Aprender y disfrutar pueden ir de la mano y muestra de ello es la visita al Santuario de Estibalitz. A escasos 10 kilómetros de Vitoria-Gasteiz, en lo alto de una colina convertida en parque natural, se eleva la joya del románico de Euskadi.
Resolver el enigma “El misterio de los canecillos” es la manera que ofrecen a los reyes de la casa de conocer los misterios y personajes del lugar. Esta es una propuesta perfecta para conocer la historia de Álava y su arte románico. Pero no todo deben ser actividades ya que es hora de descansar y las ofertas se multiplican: las familias pueden acercarse a Vitoria-Gasteiz y alojarse en el Hotel NH Canciller Ayala Vitoria. Dispone de family rooms, servicio de alquiler de bicicletas, preparación de picnic y recursos pedagógicos, incluso servicio de babysitter. Por su parte, el Hotel Zenit Jardines de Uleta está recomendado para familias, con servicios como family suits, rincón infantil y menús para niños.
Si lo que apetece es disfrutar del entorno más rural tenemos la Granja de Vitoria en Otogoien, a 10 km de Vitoria-Gasteiz. En ella encontraremos las comodidades de un apartamento con la posibilidad de disfrutar del jardín, del huerto o de los animales. Otra opción puede ser la Casa rural de Lecea y Alianzas preparada para pasar unos días en familia y que cuenta con unos amplios jardines acotados para poder relajarse sabiendo que los niños están seguros.
En Vitoria-Gasteiz y con niños
Aprovechando que descansamos en la capital alavesa se pueden realizar varias actividades, todas adaptadas al público familiar. Podemos destacar Ataria Salburua, centro de interpretación de los humedales de Salburua. En el centro no solo cuentan con espacios de sensibilización ambiental sino que también disponen de espacios infantiles. La maravillosa Catedral de Santa María, además de recorridos guiados diseñados específicamente para los más pequeños de la casa, ofrece un espectáculo audiovisual disponible en idiomas que hace partícipe al público infantil de parte de la historia del templo.
Otra recomendación es parar a comer en el restaurante Dolomiti u Olarizu el nuevo y después visitar el Museo Artium, Centro museo Vasco de Arte Contemporáneo. Los fines de semana ofrecen visitas adaptadas y experimentales para familias y niños de diferentes edades (entre semana por las tardes la entrada es gratuita).
Rumbo a Aiala
Dada la gran variedad de restaurantes que hay en Álava puede ser interesante conocer otra comarca y acercarse a Aiala. Realizar parada y fonda en el precioso y reconocido Restaurante Bideko, un establecimiento tradicional con menús para todos los gustos ubicado en un entorno mágico bajo la atenta mirada del macizo del Gorbeia, es una propuesta excepcional.
Por su parte, en el Hotel y Restaurante Arcos de Quejana no solo descubriremos un establecimiento con encanto en un maravilloso entorno sino mucho más: una pinacoteca, una galería de arte al aire libre, un bosque solidario y desde este año, un robledal de ensueño.
Seguimos por Álava, y visitamos el Parque natural Izki, un espacio protegido con un amplio patrimonio cultural que transmite la historia de estos valles y montañas. En la casa del parque existe una exposición permanente interpretativa basada en paneles, fotografías y elementos manipulables.
Y en Navidad, el Olentzero
Y como estamos en otoño y en breve comienza la Navidad no podemos quedarnos sin conocer a uno de los elementos más singulares y característicos de la cultura vasca. Ya que, si hay algo que los niños y las familias de Euskadi esperan ansiosas, es la llegada del Olentzero.
Conocer este personaje ancestral y la magia que lo rodea también puede resultar una experiencia única. El Olentzero es un apreciado carbonero que trabaja en las montañas durante todo el año y que se encarga en Nochebuena de bajar de la montaña y traer regalos a los niños que se han portado bien, o carbón, a los que han sido más pillos. En el Museo del hierro vasco Mirandaola en Legazpi (Gipuzkoa) nos espera una experiencia de misterio y fantasía con la ayuda de un cuentacuentos.
Aprovechando que nos encontramos por la zona también puede ser una opción acercarse a la Escuela 1950 donde los pequeños podrán descubrir cómo eran las escuelas de la época. También visitaremos el Caserío Igeralde-Goena donde está ubicado el Rincón del pan. Aquí explican cómo se elabora este producto tan necesario y valorado en nuestras casas. Asimismo veremos el antiguo molino del siglo XVI y el horno de leña que todavía hoy continúan a pleno rendimiento.
Rumbo a Gipuzkoa
Y si hemos comenzado esta ruta por la vertiente alavesa del parque natural del Aizkorri-Aratz, no menos interesante y animado puede ser conocer el lado guipuzcoano del Aizkorri-Aratz.
El Parketxe de Arantzazu, ubicado en el santuario del mismo nombre, ofrece una accesible ruta de 1.6 km con la que podremos conocer los encantos del lugar. En Oñati nos dirigiremos a las Cuevas Arrikrutz que dispone de una visita espeleo-turística para las familias, el “espeleo txiki”, dirigida especialmente a los más pequeños (mayores de 6 años). Es una vivencia que mezcla tanto aventura espeleológica como la exploración del mundo subterráneo.
En Oñati también podremos acercarnos al centro de interpretación del chocolate Txokolateixa ubicado en la antigua sede de la Chocolatería Orbea. Tampoco pasamos por alto el museo de la sal situado en Leintz Gatzaga, un pequeño pueblo que se ha formado y desarrollado alrededor de la fuente de agua salada, (gatza/sal) como su nombre indica. Recogiendo esta tradición, en este espacio se pueden apreciar detalles de la producción de sal como oler, degustar y tocar diferentes tipos de madera, entre otras propuestas.
Y, para acabar, Bizkaia
Finalizamos nuestra ruta por Gipuzkoa y nos dirigimos a Bizkaia. Si nos encontramos en Mungia podremos conocer Izenaduba Basoa, el primer centro de interpretación de la mitología vasca de Euskadi. Durante estas fechas cercanas a la Navidad suelen realizar muchas actividades. Aquí Olentzero y Mari Domingi recogerán las cartas y atenderán los deseos de los más pequeños.
El centro cuenta con el caserío más antiguo de Bizkaia y un parque tematizado en el exterior de más de 6.000 m2. adaptado para personas de movilidad reducida. Podremos descansar en la Casa Rural Txokoetxe, que cuenta con 5 habitaciones, cocina completamente equipada y agradable jardín con barbacoa a tan solo 15 minutos de San Juan de Gaztelugatxe.
Nos desplazaremos unos pocos kilómetros hacia el corazón de Bizkaia, a la comarca de Durangaldea, para disfrutar de otro tipo de actividades.
En Alluitz Natura se puede vivir la experiencia “Pastor por un día” ya que en noviembre empiezan a nacer los corderitos y en invierno los más pequeños podrán disfrutar dándoles el biberón.
Cerca está Eguzki B&B un alojamiento family friendly, con capacidad de alojar a una familia con varios niños equipada con todo lo necesario para una estancia cómoda y agradable.
Si el día no es apto para pasear podemos optar por Hontza museoa en Mañaria, el primer museo de ciencias naturales de Bizkaia que actualmente cuenta con una exposición permanente con 1.500 ejemplares entre Botánica, Fungi, Geología y Zoología.
Estos son solo algunos de los planes que ofrece Euskadi. Para más información se puede visitar la página web Planes con niños en Euskadi y descargarse tanto la guía de Turismo Familiar de Euskadi como el mapa de los recursos del club de Turismo Familiar de Euskadi. El club garantiza que todos sus recursos están adecuados a las familias con niños, tanto en el ámbito de las instalaciones como de los servicios. Y sin perder de vista que la seguridad contra el Covid es una prioridad, todos cumplen con las medidas de seguridad recomendadas por las autoridades para que las estancias de las familias sean seguras y placenteras.