Fermanagh, el condado de los lagos de Irlanda del Norte
El Condado de Fermanagh, uno de los seis que integran Irlanda del Norte, es muy conocido por sus más de 700 kilómetros de lagos, canales y ríos que conforman la red navegable más larga de Europa. Es el destino predilecto para los amantes del agua, ya que se puede disfrutar de este paraje desde un barco de recreo, practicar esquí acuático o piragüismo, o pescar trucha salvaje marrón o salmón.
En Fermanagh, además, se puede contemplar tanto en barco como caminando el submundo de estalactitas, estalagmitas y cascadas de las Cuevas de Marble Arch, el único geoparque reconocido por la UNESCO en Irlanda del Norte.
En verano Fermanagh acoge el Festival de la Dama del Lago en Irvinestown. Según cuenta la tradición popular, una mujer vestida de largo y con flores en la cabeza se aparece en el Lago Erne en mayo, hecho que, para los autóctonos, es un buen presagio.
Otro lugar de obligada visita es la ciudad insular de Enniskillen, cuyo castillo del siglo XV alberga el Museo de los Fusileros de Inniskilling. Además, Fermanagh tiene tres propiedades Patrimonio Nacional: Castle Coole (siglo XVIII), una de las mejores casas neoclásicas irlandesas; Crom Estate, una reserva natural boscosa islas y ruinas históricas donde está el Árbol de Tejo (uno de los 50 árboles británicos más grandes); y Florence Court, que fuera residencia de los Condes de Enniskillen. Esta última fue una de las casas más importantes del Ulster en el siglo XVII y destaca por la yesería rococó y su colección de muebles ingleses.
Otras visitas aconsejables son el Buttermarket de Enniskillen y la fábrica de cerámica de Bellek, que produce desde hace 150 años una famosa porcelana muy codiciada por los coleccionistas.