Hotel Vall de Núria, cuando un alojamiento es tu destino
Vall de Núria es uno de los destinos más representativos del Pirineo catalán. Pertenece al término municipal de Queralbs, en la provincia de Girona, y está rodeado por picos de casi 3.000 metros de donde nacen multitud de fuentes y torrentes.
Este valle pirenaico es un lugar muy singular porque tiene la particularidad de que no se puede llegar con el coche. Solo se puede acceder a pie o con un transporte muy emblemático: el tren cremallera. Dicho ferrocarril tiene un recorrido de 12,5 km, supera un desnivel de más de 1.000 metros, y cuenta con tres paradas: las dos primeras en la localidad de Ribes de Freser y la tercera en la población de Queralbs.
Nuestro consejo es que lleguéis a Vall de Núria de día porque el momento en el que el tren cremallera sale del último túnel os vais a quedar con la boca abierta porque vais a aparecer, de repente, en un valle rodeado de montañas majestuosas y un lago idílico.
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Un alojamiento para todos
Una vez llegados al destino lo más recomendable, antes de comenzar a hacer fotos desaforadamente, es hacer el check in en el Hotel Vall de Núria, un alojamiento con encanto de tres estrellas, equipado con todas las comodidades y que está abierto a todos los públicos (familias, parejas y grupos), incluso a las mascotas.
El Hotel Vall de Núria, ubicado en el edificio Sant Josep, es mucho más que un alojamiento ya que es un lugar perfecto para desconectar. Como no hay vehículos por la zona hay un ambiente de tranquilidad absoluta y el aire puro que se respira está libre de todo tipo de contaminación, incluso de la lumínica. Por este motivo se pueden realizar por la noche actividades de observación de estrellas porque el cielo de Vall de Núria te permite ver los astros y, con suerte este 2024, alguna aurora boreal.
Un hotel con historia
Situado a más de 2.000 metros de altitud, los clientes que se alojen en este establecimiento podrán encontrar un edificio con cien años de historia. Y es que, a principios del siglo XX, tras la inauguración de la iglesia en el año 1911, se construyó este hotel que a día de hoy todavía se conserva pero que ha sido renovado en varias ocasiones a lo largo de los años. Está formado por 75 habitaciones completamente equipadas y muchas de ellas renovadas: 4 suites y 10 habitaciones familiares superiores. También cuenta con habitaciones petfriendly para aquellos que se van de vacaciones con sus mejores amigos perrunos o gatunos.
Otra de las opciones que ofrece este alojamiento son sus 20 apartamentos, con una capacidad máxima de 6 personas, que están completamente equipados. Por otro lado, el hotel cuenta tres salas recién reformadas que resultan ideales para organizar reuniones y pequeños actos y un auditorio con 140 butacas.
Ocho puntos de restauración para todos los gustos
Cabe resaltar también la gastronomía del hotel Vall de Núria ha mejorado a lo largo de los años. De hecho nos hemos alojado en varias ocasiones en este establecimiento y os podemos asegurar que cada vez se come mejor. En este reel podéis ver lo bien que comimos durante nuestra estancia.
En todo el complejo hay ocho puntos de restauración, ideales para todos los gustos y los bolsillos, pero a mí me gustaría resaltar dos en especial: su variado bufé que destaca por su showcooking de carnes de la comarca catalana del Ripollès y su restaurante gastronómico, El Racó de la Vall, con platos elaborados con productos de kilómetro 0.
Historia y espiritualidad
El hotel Vall de Núria es un lugar histórico porque aquí se fraguó el Estatut de Autonomía de Catalunya, también conocido como Estatut de Núria, que se aprobó en el año 1932 en la Generalitat de Catalunya. Una de sus estancias, el Salón del Estatut, está dedicado a la norma institucional que la comisión redactora encabezada por el diputado y abogado Jaume Carner elaboró en una de las habitaciones del hotel en el año 1931.
Tampoco nos podemos olvidar del carácter espiritual de Vall de Núria ya que aquí está uno de los santuarios marianos más venerados de Catalunya. Muy cerca se encuentra la pequeña ermita de San Gil, dedicada al santo que dio origen en el año 700 a este enclave.
Actividades en Vall de Núria
Vall de Núria es un destino perfecto para todas las edades ya que se pueden hacer multitud de rutas de todos los niveles para recorrer los alrededores además de otro tipos de actividades como paseos en barca, circuitos de orientación o rutas en poni o a caballo. Los niños pueden jugar en El Cau de la Marmota, ver sus animales de granja o jugar al minigolf. Y, en invierno, estas actividades se realizan en la nieve que tanto gusta a los más pequeños de la casa.
Otra opción es subir con el teleférico de la Coma del Clot a un espectacular mirador, donde se encuentra un albergue familiar, desde donde parten infinidad de itinerarios por las montañas de alrededor. Y es que en Vall de Núria puedes estar más de 15 días y realizar cada jornada una ruta diferente.
Un hotel comprometido con el medio ambiente
El edificio de Sant Josep, tras una última restauración en la que se ha conservado su exterior y se ha fomentado su integración con el entorno, ha recibido el premio GreenBuilding de sostenibilidad de la Unión Europea. También destaca la iniciativa Ecovall, que fomenta el respeto y la conservación del entorno natural dinamizando la economía del territorio, adaptándolo al futuro escenario en pleno cambio climático, y controlando el impacto de las diferentes actividades sobre el medio.
En consecuencia, Vall de Núria ha puesto en marcha una serie de medidas que apoyan la eficiencia energética como el proyecto ‘Gasoil 0’, que implica la sustitución de combustibles fósiles por energías renovables como la geotérmica, para aprovechar el calor producido en el subsuelo. Cabe destacar que Vall de Núria cuenta con una central hidroeléctrica propia, que proporciona una fuente de energía limpia.
Otro ejemplo es la instalación de iluminación LED de bajo consumo para optimizar los recursos. Además, en cuanto a la gestión de residuos, se ha apostado por el uso de recursos compostables que reducen la generación de residuos plásticos y se ha puesto a disposición de los huéspedes diferentes puntos de reciclaje. En las habitaciones se han retirado los plásticos de un solo uso y las monodosis, y se ha instalado dispensadores de jabón ecológico.
Vall de Núria, un destino para todo el año
En definitiva, Vall de Núria es un destino totalmente desestacionalizado ya que puedes viajar a él durante todo el año.
En primavera, verano y otoño puedes disfrutar de sus alrededores realizando rutas a pie o a caballo mientras que en invierno se convierte en una de las mejores estaciones de esquí para las familias donde, además de practicar esquí alpino, puedes hacer otro tipo de actividades como excursiones con raquetas o en moto de nieve, entre muchas otras.