Un parador en la capital del teatro clásico español
El parador de Almagro, ubicado en un entorno histórico-artístico excepcional de la provincia de Ciudad Real, ocupa el antiguo Convento de Santa Catalina, que data del siglo XVII. Fue el primer convento franciscano de la ciudad donado por Jerónimo Dávila de la Cueva en el año 1603 como promesa a su esposa Catalina de Sanabria.
Entrada del Parador de Almagro © Paradores
El edificio se trata de un claro ejemplo de arquitectura conventual renacentista de la Escuela de Toledo, sencillo como marcan los cánones de la orden franciscana. Está construido en ladrillo, tapial, piedra y madera y rematado con alicatados de traza mudéjar.
Uno de los 14 patios del Parador de Almagro. © Paradores
Siete años de restauración
En el año 1979 y a lo largo de siete años se restauró, ya que estaba casi en ruinas, para convertirlo entonces en uno de los alojamientos más emblemáticos de la red de Paradores. A tal efecto, se respetaron los únicos espacios originales que sobrevivieron: sacristía, sala capitular, escalera y una pequeña bodega y se amplió considerablemente la primitiva fábrica del edificio incorporando catorce nuevos patios, lonjas, plazuelas y un huerto.
Habitación número 7 del Parador de Almagro. © María Jesús Tomé
El Parador de Almagro cuenta en la actualidad con 54 habitaciones totalmente equipadas que combinan el diseño y mobiliario clásico y los servicios modernos. Asimismo, este establecimiento ofrece la exclusiva experiencia de disfrutar de la cocina regional manchega servida en el ambiente monacal que impregna al restaurante ubicado en este antiguo convento.
El Parador de Almagro ofrece gastronomía típica manchega. © Paradores
Un Parador en un entorno único
Almagro, como villa declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1972, destaca por su riqueza patrimonial. Su historia está ligada a la Orden de Calatrava, una de las principales órdenes militares religiosas de la historia de España. Esta localidad gozó de un gran prestigio, que aumentó con el nombramiento de Carlos I como Maestre, convirtiéndose en la capital del teatro español del Siglo de Oro.
El antiguo Convento de Santa Catalina cuenta con lugares exclusivos como este patio. © Paradores
REEL Parador de Almagro
La mejor manera de conocer Almagro es paseando por sus calles y descubrir su Corral de Comedias del siglo XVII, donde estrenaron sus obras dramaturgos como Lope de Vega o Tirso de Molina. Merece especialmente la pena visitarlo en julio cuando se celebra el Festival Internacional de Teatro Clásico.
Tampoco hay que perderse su Plaza Mayor, con sus balcones acristalados de color verde y largos soportales de columnas de piedra, y algunos edificios emblemáticos de esta localidad ciudadrealeña como la Iglesia de San Agustín, el Palacio Fúcares, el Palacio de Valdeparaíso o el Convento de la Asunción de Calatrava.
Parador de Almagro
Ronda San Francisco, 31
13270 Almagro (Ciudad Real)
Tel. +34 926860100