Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, la Asturias más autóctona
El Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, en el suroeste de la Comunidad Autónoma, cuenta con una de las más ricas naturalezas del Cantábrico. Comprende la cuenca alta de los ríos Ibias y Narcea, y recorre los concejos de Cangas del Narcea, Degaña e Ibias. En este espacio bosques sorprendentes y paisajes rurales se muestran de manera diferente durante cada estación del año.
Ermita del Campillo. Foto Manuel S. Calvo. Cedida por Turismo de Asturias.
Si los Picos de Europa o el Parque Natural de Redes son ejemplos de la naturaleza en Asturias, en el Parque Natural de Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, con una superficie de 555 kilómetros cuadrados, destacan dos espacios naturales de gran interés: la Reserva Natural Integral del Bosque de Muniellos y la Reserva Natural Parcial del Cueto de Arbás.
Si hay algún aspecto que destaque a esta reserva de la biosfera es su carácter indómito y la riqueza faunística que atesora. Aquí se encuentran especies amenazadas y tienen en el oso pardo su icono de preservación medioambiental. En este espacio está el grupo más numeroso de toda la Península Ibérica, siendo uno de los principales protagonistas de los programas de avistamiento de fauna que se desarrollan en el parque.
Un parque lleno de matices
Lo que más llama la atención del paisaje del parque es la gran cantidad de matices que se encuentran y que definen con mucha personalidad cada uno de los concejos que lo conforman. Así, en la zona de Cangas del Narcea, el relieve es escarpado y accidentado al paso del río Narcea y sus muchos afluentes. Este espacio es ideal para pescar truchas y salmones.
Muniellos. Foto Alfonso Polvorinos. Cedida por Turismo de Asturias.
En esta zona se incluye parte del extraordinario bosque de Muniellos, famoso por su increíble robledal. Este espacio que se puede visitar de una manera restringida y ordenada para preservar así intacta su naturaleza excepcional. En otras zonas forestales del concejo se pueden ver algunas de sus numerosas especies salvajes como el corzo o el jabalí.
En el concejo de Degaña, por su parte, abundan las sierras altas y los valles siendo su paisaje uno de los más característicos de la Cordillera Cantábrica. Aquí hay también robledales y otros tipos de árboles como abedules, tejos y acebos.
Oso pardo. Foto Cealma. Cedida por Turismo de Asturias.
El tercer y último concejo que se incluye en este parque es el de Ibias. Se caracteriza por su paisaje de gran riqueza vegetal y por tener un gran relieve montañoso sin ser, a su vez, demasiado escarpado. Fue declarado Parque Natural en 2002 y Reserva de la Biosfera en 2003.
Reserva Natural Integral de Muniellos. Foto Carlos Salvo. Cedida por Turismo de Asturias.
El monte de Valdebois, en el bosque de Muniellos, es su lugar de referencia. Las fuentes del río Ibias y sus afluentes bañan las sierras y valles de aguas cristalinas donde se encuentran testimonios del neolítico y de la época castreña y romana.
En este sentido, los dólmenes de Pradías y Chao Leda fusionan historia, cultura y arte con el inigualable entorno de parajes como Muniellos o los Ancares. En Ibias sobresale la arquitectura popular de hórreos y pallozas, buena parte de los cuales mantienen techumbres vegetales.
Vendimia. Foto Juanjo Arrojo. Cedida por Turismo de Asturias.
Vino de Cangas, seña de identidad de Asturias
Por último en la comarca de Fuentes del Narcea hay unas buenas condiciones climatológicas que han permitido el cultivo de la vid. El Vino de Cangas, una seña de identidad de Asturias además de un elemento diferenciador de la comarca, fue impulsado hace varios siglos por los monjes benedictinos del Monasterio de Corias, convertido en Parador. Hoy forma parte del acervo cultural de la comarca y se puede disfrutar solo o con la excelente gastronomía local.
Más información: http://www.fuentesdelnarcea.org/
